LOS ACCIDENTES POR ATAQUE Y MORDEDURA PARTE 2 ¿COMO INHIBIR LA MORDEDURA DE UN PERRO?

28.03.2013 11:10

¿Que papel juega la socialización?

 

La socialización es uno de los factores más importantes en la prevención de las agresiones interespecifícas, en especial hacia las personas (niños y ancianos los más vulnerables). Consiste en la presentación de situaciones deseadas, en forma gradual, repetitiva y positiva con el fin de modular aspectos tan importantes como:

 

- impronta o troquelado

- la jerarquización

- los autocontroles

- la comunicación

- el apego

 

La impronta es un aprendizaje primario de tipo social que se manifiesta por cambios adaptativos en el comportamiento individual como resultado de la vivencia, también llamado periodo sensible, va de la 3a semana hasta la 16 a semana y es vista como un período crítico para el cachorro, ya que todo lo que le ocurra a nivel sensorial, social o ambiental “impregna” al animal dejándole una poderosa huella en su comportamiento.

El cachorro deberá aprender que especies son amigas y no, cuales son las señales de alarma y apaciguamiento (comunicación), cuál es su posición social al interior de la manada (jerarquización) y especialmente le permitirá estructurar su conducta (autocontroles); lo que posibilitará que este animal en su vida adulta posea estabilidad emocional y constancia comportamental.

Gran parte de la estabilidad emocional estará relacionada con el adecuado apego – desapego que haya experimentado el cachorro al momento del destete, durante el ingreso a la manada humana y el respectivo desapego por parte de sus guardianes humanos hacia la 13 a semana de vida.

A continuación y en forma de cuadro veamos el momento oportuno de realizar los procesos comportamentales que apoyen a la socialización y las consecuencias de no realizarlos adecuadamente:

Conocer las señales de alarma (aprendiendo a comunicarnos con el perro)

En este segmento nos referimos a las señales que deben ser leídas e interpretadas por las personas para evitar agresiones, ataques y mordeduras.

Partimos del reconocimiento y comprensión de las señales comunicacionales del perro, así como de la utilización adecuada de los canales de comunicación que utilizan los animales y en especial los caninos.

Es necesario comprender además, que los sistemas sensoriales del canino son muy diferentes a los nuestros y sus mecanismos de reacción también; por esta razón jamás deberemos humanizar la interpretación de sus señales.